Ya sea después de una ascensión al Piz Buin, de una excursión en bicicleta o para una ocasión festiva, las especialidades de la cocina del Hotel Meisser son una buena recompensa. Se caracterizan por la interacción de ambiente, vistas y sabores.

Ya sea después de una ascensión al Piz Buin, de una excursión en bicicleta o para una ocasión festiva, las especialidades de la cocina del Hotel Meisser son buenas recompensas. Se caracterizan por la interacción de ambiente, vistas y sabores. Descubra nuestros lugares de placer.

Comedor histórico:
La gran dama del Hotel Meisser - con digno carisma: la sala Art Nouveau de principios de siglo en el antiguo pajar de la casa principal constituye el elegante marco de nuestros menús de media pensión con recomendación de vinos. Le espera un variado menú de 4 platos, que siempre incluye opciones vegetarianas. Y, por supuesto, los huéspedes con intolerancias o alergias pueden disfrutar de su comida con nosotros sin preocupaciones. Póngase en contacto con nosotros.

Restaurante Garden:
Conocida como la terraza panorámica más bonita de la Engadina y el palco más popular en verano. Recomendamos un almuerzo ligero, especialidades de los Grisones o tartas caseras.

Restaurante panorámico La Veranda:
En nuestro restaurante a la carta, la naturaleza siempre se sienta a la mesa como invitada de honor para una deliciosa cena. Amplias vistas, espectáculos de luces cambiantes y un imponente panorama miman la vista. Como huésped de la casa, aquí empezará el día con un rico desayuno de montaña del bufé. Finos Gipfelis se encuentran con mermeladas dulces o miel de Engadina. Una selección regional de quesos, embutidos y jamón va bien con pan crujiente y huevos de gallinas felices. Los amantes de la fruta pueden combinarla con yogur y variar hasta saciarse con muesli, frutos secos, cereales y semillas. Zumos, chocolate, café, té... - como a ti te gusta.

Parsepan en la Chasa Pepina:
El único lugar del Hotel Meisser donde las vistas a la naturaleza no son protagonistas por una vez. Pero el original establo lo compensa con su ambiente acogedor. Todos los viernes por la noche, la rústica bóveda es el lugar de billar, dardos, música y tertulia. Por cierto, también es un lugar maravilloso para tu celebración personal.


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